¿Las personas con diabetes pueden comer frutos secos?
En las personas con diabetes hay generalmente un riesgo cardiovascular aumentado, por lo que es importante enriquecer la dieta con alimentos ricos en antioxidantes y grasas saludables. Aportar frutos secos en la alimentación de las personas con diabetes es muy recomendable por su alto valor nutricional, su relativa baja cantidad de hidratos de carbono, bajo índice glucémico y favorable contenido en fibra. También es importante el aporte de grasas saludables y proteínas que supone su consumo contribuyendo en conjunto a lograr un buen perfil glucémico postprandial.
Es cierto que son alimentos que en algunas personas alérgicas a los mismos pueden provocar reacciones alérgicas graves en cuyo caso su ingesta debe ser excluida y tener especial cuidado con su accidental exposición como pudiera ser en forma de trazas. También hay que tener en cuenta que son alimentos muy energéticos, aportan muchas calorías, por lo que un consumo excesivo puede suponer una limitación en dietas hipocalóricas para perder peso.
Los frutos secos contienen una gran cantidad de grasa insaturada, entre el 44%-78% entre ácidos grasos Monoinsaturados (MUFA) y Poliinsaturados (PUFA). Un 8-25% de proteína y una cantidad relativamente pequeña de carbohidratos. Por otro lado, es importante el aporte de fibra que suponen así como de vitaminas, vitamina E, niacina, colina, ácido fólico y minerales (magnesio, potasio, calcio y fósforo). También pueden aportar componentes fenólicos, carotenoides y fitoesteroles.
¿Qué frutos secos son buenos y cuáles son sus propiedades para la diabetes?
Los frutos secos tienen capacidad antioxidante y favorecen un buen perfil de colesterol en sangre. Por otro lado, en algunos estudios se ha observado que el consumo de ciertos frutos secos como son las almendras, cacahuetes y pistachos logran una reducción relativa en las cifras de glucemia postprandial. Los pistachos, por ejemplo, son particularmente ricos en Beta-carotenos.
Aquí algunos ejemplos de frutos secos ideales para tomar entre horas o en comidas principales, solos o acompañados por otros alimentos:
De entre los frutos secos es interesante combinar distintos tipos para aportar variedad, sabor y distintos beneficios a la dieta. Generalmente, se recomienda el consumo de entre 16-28 gramos/diarios de frutos secos, es decir, un puñadito pequeño de frutos secos al natural, idealmente sin estar fritos y sin sal añadida.
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