En niños con diabetes en los que no se observa la presencia de estos anticuerpos, habría que pensar en la presencia de otros tipos de diabetes menos frecuentes (diabetes monogénica). Cuando se descartan otros tipos de diabetes y tiene las características típicas de un déficit absoluto de insulina (diabetes tipo 1) se puede catalogar como diabetes tipo 1 B (idiopática = de causa desconocida)
Desencadenantes
Los desencadenantes que inician la reacción inmunomediada de destrucción de la célula β no están del todo claros, pero parece que dicho proceso destructivo empieza meses o años antes del inicio de los síntomas. Algunas infecciones víricas como puede ser la infección por enterovirus, citomegalovirus, paperas, gripe o rotavirus pueden actuar como desencadenante.
Los criterios diagnósticos de diabetes son, en ausencia de síntomas, la presencia, en al menos dos determinaciones, de glucemia plasmática en ayunas ≥126 mg/dL, hemoglobina glicosilada o glicada (A1c) ≥6.5% o la situación más observada en niños que es la presencia de síntomas de hiperglucemia y glucemia plasmática de ≥200 mg/dL en una determinación. En niños, es menos frecuente que sea necesaria su realización, pero otra forma de diagnosticar diabetes es la presencia de glucemia plasmática a las 2 horas ≥200 mg/dL tras una prueba de sobrecarga oral de glucosa con 75 gramos.
A nivel mundial, se calcula que cada año aproximadamente 96.000 niños/adolescentes menores de 15 años son diagnosticados con diabetes tipo 1. En las últimas décadas, se ha observado un aumento en la incidencia global de diabetes incluyendo a la tipo 1. En España, se estima que la prevalencia de diabetes tipo 1 en menores de 15 años es de en torno a 1-1.5 casos por 1000 habitantes. Al contrario de lo que se observa en otras enfermedades autoinmunes (generalmente más frecuentes en mujeres) no hay diferencias tan marcadas entre sexos.
Existe una agregación familiar en aproximadamente el 10% de los casos de diabetes. No hay un patrón claro de herencia. Hay múltiples genes implicados, entre ellos, el genotipo HLA DR3/DR4 o DQ2/DQ8 que aumenta la susceptibilidad.
En gemelos idénticos en los que uno desarrolla DM1, el riesgo de que lo desarrolle el otro a lo largo de la vida no llega al 40%. Entre hermanos, el riesgo es del 4%. Los hijos de un padre con DM1 tienen un riesgo entre el 3.6%-8.5% siendo mayor que si es la madre la que tiene DM1 (el riesgo es del 1.3-3.6% para los hijos).
Para cualquier duda sobre diabetes, consulte siempre con su profesional sanitario.
Dra. Mª Ángeles Velez
Médico Especialista Endocrinología y Nutrición
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